El éxito imprevisto del Bicing obliga a replantear el servicio

El Bicing se tambalea de éxito. Con todas las previsiones rotas, desbordadas por la realidad, los responsables de la bicicleta pública de Barcelona intentarán aprovechar los meses de verano para analizar con más tranquilidad el abrumador inicio. También quieren mejorar ciertos aspectos para que la euforia inicial de los usuarios no se convierta en un descontento generalizado por la ausencia de bicicletas en unas estaciones o el overbooking en otras.
La diferencia entre lo que preveían los impulsores --Clear Channel, firma explotadora del sistema, y la empresa municipal Barcelona Serveis Municipals (BSM)-- y la realidad de estos tres meses de funcionamiento revela la envergadura del problema al que se enfrentan.
Como muestra, bastan dos datos. Para finales de año se esperaban 15.000 abonados y el Bicing estaba diseñado para que cada bicicleta soportara unos 10 usos diarios, para así tener siempre vehículos a disposición de los ciudadanos. Sin embargo, las cifras del pasado viernes, cuando se acabó la primera fase de implantación con un abono promocional de seis euros por año, son bien diferentes: 80.370 abonados y un uso medio diario de cada bicicleta de 16,79 veces.

TODO TIPO DE USUARIOS
Una locura, fruto de la fiebre que esta bici amable y sencilla ha despertado entre todo tipo de gente, de estudiantes a amas de casa, pasando por profesionales cuarentones y jubilados. Y esos casi 17 usos diarios de cada bici son los que crean la sensación de que casi nunca hay unidades disponibles, sobre todo en estaciones concretas.
Como el viaje medio en Bicing dura 17 minutos y 44 segundos, cada bicicleta está casi 300 minutos, o sea cinco horas, en movimiento. Clear Channel ha creado un equipo de 80 personas y 10 camiones y furgonetas para intentar hacer frente a esta avalancha, que además incluye unas 80 bicicletas que entran cada día en los talleres de reparación y mantenimiento. Las averías son otras de las consecuencias de un uso mucho más intensivo de lo esperado.

MÁS PÁRKING EN LAS PLAYAS
Debido al éxito, los responsables han ido improvisando soluciones sobre la marcha y abriendo estaciones antes de que llegara el 6 de julio, que era la fecha fijada para inaugurar de golpe una cincuentena de paradas. Ahora, las 100 previstas están casi todas operativas, a excepción de algunas en el entorno de la estación de Sants y la plaza de Francesc Macià. Con la llegada del calor, también se ha optado por aumentar el número de plazas de aparcamiento cerca de las playas, donde suelen producirse los llenos en las estaciones del Bicing.
Aun así, han sido las estaciones intermedias entre mar y montaña y las más céntricas las que han registrado un mayor movimiento, como la de la plaza de la Universitat, Tetuán, Gran Via, Arc de Triomf y la plaza de Antonio López. Como ahí llegan y salen muchos usuarios, casi siempre hay bicicletas disponibles.

92.000 CONSULTAS
El interés que ha despertado el invento --que Clear Channel inauguró por primera vez en 1997 en la ciudad francesa de Rennes, aunque a una escala mucho más modesta-- también se refleja en el total de llamadas a la oficina de atención al cliente: más de 92.000 desde el 23 de marzo, además de 12.000 correos electrónicos, 9.960 consultas en la oficina del Portal de l'Àngel y 441.000 visitas a la página www.bicing.com.